lunes, agosto 28, 2006

El viejo Ruggero

Dos leches en una bolsa camiseta llevaba el viejo Ruggero hacia su casa, que dicho de paso yo no conocía. Su único medio de transporte era una bicicleta símil a las de carreras del tour de france pero bien vieja, los caños flacos hacían que piense que bien podía estar flaca y mal alimentada, un esqueleto. La pintura roída por los años y un manubrio que era muy parecido a una cornamenta de algún animal, pero que el había invertido para no perjudicar aun mas su espalda.
Ruggero era tapicero, tapicero a sus tapices, un buen trabajo artesanal mal pago.
Un ancho bigote cano, casi amarillento, recorría su labio en forma asimétrica, el cigarrillo le había dado ese tono tan ocre y característico. En cuanto a su cara se podría decir que si mirada afilada detrás de los surcos de sus arrugas me producían un inevitable escalofrío.
Los años no se dejaban vencer en esa expresión labrada a heladas y soles marchitantes. El invierno siempre fue crudo, y más arriba de su preciado vehiculo.

Las leches dentro de unas bolsas camiseta colgadas del lado derecho de la cornamenta del animal mal alimentado desestabilizaban su pedalear.

Su cuerpo dejaba señales de lo que había sido su vida en el taller, una leve inclinación de su cuerpo hacia adelante como si estuviera encorvado, su calva ya ganaba toda su cabeza salvo los pocos pelos que se asomaban desde la nuca y unas manos tan arrugadas y frías como la superficie de la helada luna de Saturno; titán.
Sus raídos vestidos daban la sensación de una extrema pobreza, pero eran los atuendos que veían las paredes de su taller día a día.
Era su ropa de trabajo.
Sus botines de cuero ya gastados no hacían mas que ser un adorno, suponían ser muy incómodos.
No me gustaban sus pelos en la oreja, es algo que me repugna de la mayoría de los mortales.
Las varias veces que atendí llevo las dos características leches, que suponía, eran para alimentar a sus mascotas de las que nunca menciono palabra alguna. Sus ademanes al hablar y anécdotas, de las cuales yo desconfiaba, hacían que R. hiciera de mis horas de trabajo las menos características, siempre una historia para cada día, siempre una anécdota previa a la visita a mi despensa, siempre una mujer que se dejo seducir.
Nunca supe su verdadero nombre, lo había bautizado así porque me sonaba a que era de gruyere en su interior, hasta llegue a pensar que olía a queso, puras ideas mías.
Dos leches llevaba el viejo Ruggero a su casa, el sol de junio sobre la empedrada avenida Colon le daba ese brillo de héroe matutino sin hazañas.
Lo mire hasta que su bicicleta se confundió con los pintorescos tilos

viernes, agosto 25, 2006

Invitacion

Redireccion de Aderezos en la Capilla monte do sul del Libano anuncia a todos sus ciudadanos que se efectuara el remate de las obras del "Molinillo de pimienta" el dia 13 de septiembre a las 12 hs en el vernaculo sotano del club amigos de Dawi, sito en Domenighini y Rocha. Los esperamos. Entrada un alimento perecedero.

viernes, agosto 11, 2006

Cancion Popular

Ponte poronte Pita
Petapeta Peruzza,
Ponte poronte Pita
Petá petá pe Tí

Ponte poronte Pita
Petapeta Peruzza
Ponte poronte Pita
Petá Petá Perú.

Quiero sus comentarios para la interpretacion de esto. Yo luego haré la mia.